Alonso de Sandoval, Pedro Claver y un historiador contemporáneo construyen un doloroso fresco de la esclavitud, el holocausto y la barbarie de estos hoy.Todo colombiano debe leerla para comprender los Derechos Humanos.La belleza convulsiva de la Ceiba de la memoria parece responder a la profecía de Adorno que dice: después de Auschwitz no es posible un arte sereno. Esta novela se puede leer como un fresco americano de la esclavitud, en su sentido más amplio, y también como una reflexión sobre los sufrimientos humanos y la libertad.Todo colombiano debe leerla para comprender los Derechos Humanos.La belleza convulsiva de la Ceiba de la memoria parece responder a la profecía de Adorno que dice: después de Auschwitz no es posible un arte sereno. Esta novela se puede leer como un fresco americano de la esclavitud, en su sentido más amplio, y también como una reflexión sobre los sufrimientos humanos y la libertad.La belleza convulsiva de la Ceiba de la memoria parece responder a la profecía de Adorno que dice: después de Auschwitz no es posible un arte sereno. Esta novela se puede leer como un fresco americano de la esclavitud, en su sentido más amplio, y también como una reflexión sobre los sufrimientos humanos y la libertad.
(Cartagena de Indias, 1948 - Bogotá, 2018). Escribió cuentos en periódicos y revistas hasta 1981, fecha en que se publicó por primera vez el libro de cuentos Lo Amador, que hoy lleva cuatro ediciones. Desde entonces, en sus ficciones tienen relevancia lo experimental como renovación del relato y la persistente apropiación del lenguaje como personaje y emblema. Su visión de la naturaleza, contrastada con la desesperanza de un mundo donde los se...
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